Faltan cuatro días para que este año acabe y uno no puede evitar ponerse reflexivo o melancólico en algunos casos. Por eso, creo que sería pertinente hacer un repaso de los eventos del mismo. Dado que esta es mi página dedicada a la literatura, lo mejor será hacerlo en esa materia.
Este año ha sido interesante para mí en muchos aspectos. Comenzó con el resultado de una apuesta arriesgada: La Revista Quinta Raza, que a su vez salió de una idea muy sencilla: la de mezclar a la espada y brujería con otros elementos. Así surgió —en realidad ya existía— el Macuahuitl y Náhuatl. Esta etiqueta la compró Paulo y Jorge. El primero ya tenía tiempo trabajando en algo así. Con este par, un autor argentino y otro mexicano —el combo Sin Banderas— comencé a trabajar en varios proyectos, no solo Quinta Raza, sino algunos por venir, que por cierto están replicándose como hongos.
Vale la pena destacar que con este par he aprendido mucho sobre el trabajo en equipo, como escribir una novela, como tolerar las críticas, como aceptar los cumplido y… sobretodo, mi confianza. Teníamos planes muy ambiciosos con Quinta Raza, que retomaremos en su momento, pero el Malvado Dios Murphy, señor del Infortunio los torció, pero todo tiene su sentido…. Ya veremos qué pasa en los tiempos por venir.
El trabajo con Jorge y Paulo me llevó a escribir una noveleta, la que titule La Sombra de León. Esta se encuentra ambientada en un mundo fantástico inspirado en África. De nuevo estoy en el marco de la Espada y Brujería multicultural. Aposté por lo que se denomina Sword and Soul, aunque mi sentido arácnido me dice que si un autor afroamericano la lee me diría que no es tal cosa, luego me abofetearía. Esa novela está también inspirada en las novelas Frizt Leiber, Fafhrd y el Ratonero Gris. Una suerte de carta de amor subconsciente.
De esa novela, que debe sufrir una reestructuración y revisión, aprendí mucho cuando la envié a tres editoriales. De verdad me sentí grande cuando las envié y más grande —como un verdadero escritor— cuando me rechazaron. Otro trabajo, que no despegó mucho, pero me gustó porque me permitió investigar y aprender algunas habilidades nuevas que deseo poner en práctica, fue dos cuentos que escribí y publique en Lektu, bajo el formato de pago social, llamado las Aventura de los 5 de Priyanka. Este le gustó a otro amigo, que me alentó a escribir algo así. Esto versa sobre un grupo de aventureros, de diferente etnias y pueblos —me salí del cliché del hombre blanco aventureros en plan Doc Savage— ambientada en los años 30´s que se dedican a resolver algunos caso que una Fundación les da. La mayoría de ellos son de tipo sobrenatural. Esta idea ha ido creciendo, la Construcción del mundo me está llevando por otros derroteros, por otras manías y temas que deseo explotar. Por ejemplo: los alienígenas ancestrales.
A los Cinco de Priyanka he decidido llamarlos Los Leones de Fo, en honor a los leones chinos que protegen del mal. El año que viene pienso apostar con fuerza por ellos—hay varios cuentos en la buchaca y una posible novela y una suerte de spin-off demonios, estoy construyendo mi propio universo—, porque mi amor por la Espada y Brujería ya lo estoy trabajando con Paulo y Jorge.
También intenté trabajar con un amigo venezolano: Vladimir Vásquez, de la Cueva del Lobo. Desarrollamos unas cuantas ideas locas, fue un excelente brainstorming, pero por el trabajo, los apagones, la falta de tiempo y otras cosas más aparcamos ese carro. Pensamos retomar el año que viene a ver cómo nos va.
Por último, aposte por algunos proyectos como Patreon, Ko-Fi y Amazón, pero mi falta de tiempo y mi internet variable ha hecho que ese jardín no florezca. Mientras, sigo en la lucha con la tecla, a la par que mi vida académica va viento en popa… jejejej ya me estoy haciendo un nombre como profesor. Dije que no iba a hablar de eso, pero por alguna razón me siento orgulloso de ello.
En fin, el año 2019 fue un año de retos y aprendizajes. Uno muy difícil para estas tierras. Pero, hasta cierto punto, he sabido sacarle provecho y espero que el 2020 sea mejor. Le meteré el pecho y los sortilegios al año por venir y espero sea una odisea, pues este viejo brujo tratará de estar a la altura. ,
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